EL CONSEJO PLEYADIANO DE LUZ - canalizado por: Gillian MacBeth-Louthan

EL CONSEJO PLEYADIANO DE LUZ

canalizado por:

Gillian MacBeth-Louthan

Los vemos sentados en la intersección de quienes fueron alguna vez y en quienes se convertirán. Leen la hoja de ruta de sus acciones y reacciones pasadas y esperan encontrar el futuro en esos esquemas. Ven donde cayeron y nadie los levantó. Ven donde permitieron que los estrangularan emocionalmente en un lugar de respiración restringida y aceptación limitada del aire en sus pulmones. Esperan que el mundo exhale para poder inhalar lo bueno, lo grandioso y lo que es su propósito. El monóxido de carbono de los pensamientos y negatividad de los demás flota en el aire que los rodea así que respiran superficialmente, inhalan menos posibilidades.

En la plenitud del tiempo parece que nos ve el corazón y el ojo interior. En la plenitud de la luz nos hallamos frente a todas las sombras, todas las dudas y todos los miedos. En la plenitud del corazón entramos suavemente mientras la familia y los amigos de luz se reúnen para demostrarles su amor, su aprecio, su
aceptación en sus corazones. Somos el Consejo Pleyadiano de Luz. Trabajamos dentro de la geometría sagrada de la vanguardia de la humanidad. Representamos el esquema de lo que es de naturaleza humana y humanoide.


Tratan de escapar de lo que es demasiado humano, de lo que se ha deshecho, lo que se ha desgastado. Ahora entran en un corredor del tiempo en que quedan expuestas las situaciones que una vez estuvieron escondidas y ocultas a sus ojos. El período de tiempo para observar y examinar su vida con detenimiento y
extremada precisión llega a su fin. Las elecciones de los últimos dos años los han llevado por completo a un lugar de fe o de duda. Los dos últimos años les han pedido que observen la vulnerabilidad de su humanidad, de su carne, de su deseo de quedarse o abandonar la periferia de la Tierra. En los últimos dos años han cuestionado a Dios. Han preguntado, ¿existe el Dios con D mayúscula o a este mundo lo justifican todos los “dioses con d minúscula”? Han flaqueado en las tormentas, han flaqueado en las elecciones y han flaqueado en la aceleración. El tiempo pasa y transcurre sobre sí mismo. Todo lo que aprendieron llega a un Ápice de reformar sus pensamientos, sus intenciones, y clarificar lo que todavía perdura en su corazón, mente o alma.


En los próximos días se les dará a elegir; ¿creen 100% que están alineados con lo que es luz, con lo que es Crístico, con lo bueno del hombre, de Dios, de la Vida ? Van a tener que cavar hondo en este pajar para encontrar la aguja que representa la bondad en este tiempo y lugar. Deben convertirse en una bendición viviente para todos los que se cruzan en su camino y darles una nueva esperanza. ¿Se dan cuenta que todo lo que hacen afecta a otros tanto si se ve como si está oculto ya que todo tiene un efecto dominó? Pidan ser una bendición para todo y para todos, de la mañana a la noche. Al hacer esto van a amplificar el voltaje de su cociente de luz.


Ustedes han olvidado cuál es el motivo del viaje. No están aquí para juzgar ni señalar con el dedo a otros. No están aquí para aprender lastimando a otros, físicamente o con sus pensamientos. Quienes se interponen en su camino lo hacen como un gigante poderoso frente a una montaña sagrada, sin permitirles la entrada. Si no pueden esquivar a los gigantes de su vida, encuentren un ángulo diferente de pensamiento y corazón y podrán entrar en lo que parece infranqueable.


Todo lo que ven en su vida como un bloqueo sólo se puede disolver mediante la amplificación de la vibración del amor. Pueden ser víctimas o vivir en la victoria. Todos ustedes es un Maestro de Luz y lo han olvidado debido a que la pequeñez de la vida cotidiana se ha acumulado y ya no pueden ver más allá.


Vuelvan a confirmar sus votos con la luz, con lo divino, con el futuro del planeta Tierra. Muchos de ustedes han renunciado a su libertad, a los deseos de su corazón, a lo que les trae alegría; la frecuencia de la duda ha cambiado toda la ecuación de luz y oscuridad. Les pedimos que se planten firmemente y crean, no sólo por ustedes mismos, no sólo por su planeta y su gente, sino por todas las formas de vida en todos los mundos. El resultado de la ascensión o la desavenencia de la Tierra tiene un efecto de punto de apoyo para todos los universos.